Introducción:
La historia que se presenta a continuación es una historia de la vida real, fueron muchos los momentos de espera del hombre correcto para mí, y solo la espera es lo que ha quedado.
Por lo tanto convierto la bruma de mis recuerdos en cuentos, para así hacerlo recordar a mis hijas no nacidas, las memorias de mi juventud.
Ahora solo espero que el hombre que Dios me mostro en los últimos tiempos acepte casarse conmigo.
Espero que sea de su agrado.
María Eugenia Rivillo Orellana.
Caracas 22 de Enero de 2012 Hora: 12:23 pm